lunes, 28 de diciembre de 2009

Navidad: la ternura de Dios por el hombre

Navidad: la ternura de Dios por el hombre

Julián Carrón24/12/2009   fuente: http://www.paginasdigital.es/v_portal/informacion/informacionver.asp?cod=1407&te=&idage=&vap=0&codrel=480

Hay una frase de Dostoievski que me está acompañando en estos meses, a la hora de hablar del cristianismo a personas muy diferentes, tanto en Italia como en el extranjero: «Un hombre culto, un europeo de nuestros días, ¿puede creer, creer verdaderamente, en la divinidad de Jesucristo, el Hijo de Dios?». Esta pregunta es un reto para cada uno de nosotros. De cómo se responda a ella depende el éxito de la fe en nuestros días. En un discurso de 1996, el entonces cardenal Ratzinger respondía que la fe seguirá siendo válida hoy «porque se corresponde con la naturaleza del hombre. En el hombre hay un anhelo y una nostalgia inextinguibles de lo infinito». Y además indicaba la condición necesaria: para poner de manifiesto todo el alcance de su pretensión, el cristianismo necesita encontrar la humanidad que late en cada uno de nosotros.

 

Y, sin embargo, cuántas veces sentimos la tentación de mirar nuestra humanidad concreta - por ejemplo, nuestro malestar, insatisfacción, tristeza, o aburrimiento - como un obstáculo, como una complicación y un estorbo para la realización de lo que deseamos. Por ello, nos enfadamos con nosotros mismos y con la realidad, y el peso de las circunstancias nos abruma, mientras tratamos de avanzar dejando de lado ciertos "aspectos" de nuestro yo. Sin embargo, el malestar, la insatisfacción, la tristeza y el aburrimiento, no son síntomas de una enfermedad que se pueda tratar con medicinas, como cada vez más sucede en una sociedad que confunde la inquietud del corazón con el pánico o la ansiedad. Estos síntomas, por el contrario, son señales de cuál es la naturaleza de nuestro yo. Nuestro deseo es más grande que el universo entero. La percepción de un vacío en nosotros y en lo que nos rodea, de la que habla Leopardi ("carencia y vacío"), y el aburrimiento del que habla Heidegger, prueban la condición ineludible del corazón humano, el carácter inconmensurable de nuestro deseo: nada consigue darle satisfacción y paz. Podemos olvidarlo, traicionarlo, engañarlo, pero no podemos extirparlo.

Por ello, lo que realmente obstaculiza el camino no es nuestra humanidad concreta, sino el descuido de la misma. Todo nuestro ser pide a gritos algo que pueda colmar este vacío. Lo intuyó incluso Nietzsche, que no pudo evitar dirigirse al "dios desconocido", que hace todas las cosas: «Me quedo solo, levanto mis manos / (...) "Al dios desconocido": / (...) Conocerte quiero - a ti, el Ignoto, / Que penetras mi alma hasta el fondo, / Como tempestad sacudes mi vida, / Inaferrable y sin embargo ¡semejante a mí!» (1864).

La Navidad es el anuncio de que este Misterio desconocido se ha convertido en una presencia familiar, sin la cual nadie podría mantenerse a la altura de su humanidad, pues sucumbiría a la confusión, viendo como se "descompone" su yo. «Sólo lo divino - en efecto - puede "salvar" al hombre, es decir, las dimensiones verdaderas y esenciales de la figura humana y de su destino» (don Giussani).

El signo más persuasivo de que Cristo es Dios, su mayor milagro, lo que asombraba a todos - más que las dolencias sanadas o la ceguera curada - era una mirada humana incomparable. El signo de que Cristo no es una teoría ni un conjunto de reglas es esa mirada de la que están llenos los Evangelios: su forma de tratar la humanidad de cada persona, de relacionarse con todos los que se encontraba. Pensemos en Zaqueo o en María Magdalena: no les pidió que fueran distintos, los abrazó tal como eran, con su humanidad herida, sangrante, necesitada de todo. Y su vida, al verse abrazada, recobraba toda su estatura original.

¿Quién no desearía verse mirado así ahora? De hecho, «no podemos querernos a nosotros mismos si Cristo no es una presencia como la madre lo es para su hijo. Si Cristo no es una presencia ahora - ¡ahora! -, no puedo amarme, ni puedo amarte a ti, ahora» (don Giussani). Esta sería la única manera de responder, razonable y críticamente, como hombres de nuestro tiempo, a la pregunta de Dostoevski.

Pero, ¿cómo sabemos que Cristo vive ahora? Porque su mirada no es un hecho del pasado. Sigue en el mundo tal cual: desde el día de su resurrección, la Iglesia existe sólo para que el hombre pueda experimentar la ternura de Dios, a través de las personas que son su cuerpo misterioso, testigos en este momento de la historia de esa mirada capaz de abrazar todo lo humano.

Artículo publicado en El Mundo y Corriere della Sera

Jorge
Ciudad  Autónoma de Buenos Aires
ARGENTINA

viernes, 11 de diciembre de 2009

Quién los entiende?

Quién los entiende?

Si digo si…………......soy una ramera.
Si digo no…………    …soy una frígida.
Si digo no se………  …soy una histérica.
Si no digo nada………me hago la tonta para pasarla bien.
Si me enamoro…… …una pobre crédula.
Si no me enamoro……una fría de mierda.
Si salgo con uno…… …soy una boluda.
Si salgo con varios……una trola.
Si miro hombres………una alzada.
Si no miro………………debo ser lesbiana.
Si hablo mucho…………no me siguen.
Si no hablo………….....es porque no se me cae una idea.
Si no salgo……………..soy una aburrida.
Si salgo mucho………..una fiestera.
Si digo la verdad………no me creen.
Si miento………………soy igual que todas.
Si hablo de sexo……….soy insaciable.
Si no hablo………........es porque nunca me la dieron bien.
Si soy inteligente……..se asustan.
Si soy tonta……………no sirvo.
Si no llamo……………me reclaman.
Si llamo………………no me atienden.
Si estoy seria…………..soy una amargada.
Si sonrío………………es porque estoy entregada.
Si quiero ser amiga……..la amistad entre sexos no existe.
Si quiero ser algo mas….es porque no entendí nada.
Si no puteo……………..me hago la fina.
Si puteo………………....soy poco femenina.
Si soy buena en el sexo…..es porque me pase a varios.
Si soy tranquila………….me faltaron más polvos.
Si me quiero casar……….me quede en el tiempo.
Si no me quiero casar……me hago la liberal.
Si soy dependiente………no tengo personalidad.
Si soy independiente…….me quiero llevar el mundo por delante.
Si me encaro a alguien….soy una come hombres.
Si no hago nada…………..soy una momia.
Si estoy con un viejo……..le quiero sacar plata.
Si estoy con un pendejo….es porque lo puedo dominar.
Si me visto bien……………es porque me gusta calentar a todos.
Si ando sencilla…………seguro que arreglada estaría más buena.
Si soy linda…………........seguro debo ser hueca.
Si soy fea………………...no me registran.

Por eso cuando un hombre opine algo sobre nosotras…… digamos gracias porque eso significa que estamos ahí desgastándoles la neurona.

Ciudad  Autónoma de Buenos Aires
ARGENTINA

viernes, 4 de diciembre de 2009

Me pasaron un nuevo método de afano de datos!!!

Me llamaron de DIREC TV ofreciendo una promo más q tentadora.

Me dijeron q entre a la página y vea todo lo q me brindan, cable, TV digital y TE ilimitado por $129.- Pagaderos 1° mes $60 y 2° $ 69, los conversores son gratis !!

Eso sí, la 1° cuota debe ser sí o sí con tarjeta de crédito. Piden hasta el código secreto de la tarjeta.

Les dije que le iba a pedir los datos a mi hermano (de su Tarjeta) y me dejaran un TE

Me contesta que no se los puede llamar pero q me llamará 14,30 hs.

Me fije en la página de DIRECT TV y  llame y me dicen que no hay ninguna promo así.

Llamé al 911 y me mandaron un móvil.

El agente me dijo q soy la 3° persona q llama hoy ( a las 13 hs) por el mismo motivo, a una amiga también la están llamando.

El agente me dijo NO DÉ DATOS

En cualquier momento la llaman y le dicen que tienen secuestrado a su hermano.

También si da los datos de la tarjeta lo arruinan económicamente.

No se los puede ubicar xq los llamados son de celulares y por cada llamada usan un chip distinto (número de TE) y lo tiran

Pasen esta información a todos sus contactos

Jorge
Ciudad  Autónoma de Buenos Aires
ARGENTINA
Hay un lugar, para aquellos que no quieren ver, donde "No Ver" es perder de vista acontecimientos que nunca mas se volveran a repetir. "Yo no estaba, y si estaba, dormia...","...Ese viejo verso de aquellos que nunca se metieron en nada...."